Décimas Reflexiones

Muchos días sin decimiar
no por falta de noticias
han sido las inmundicias
las que me hicieron fasquiar.
¿Cómo podemos lidiar
con tanta desfachatez,
sumada a la insensatez
de este nefasto gobierno
que nos sumió en el infierno
con cínica exquisitez?

Plagiadores y corruptos
han sido condecorados,
“ciberataques” planeados
y tremendos exabruptos.
Los discursillos abruptos
ante Naciones Unidas,
y las absurdas salidas
en lo internacional
nos metió a un berenjenal
con las patas bien metidas.

Iraníes son amenaza
y los rusos nos atacan.
Venezolanos atracan
y Chile nos acoraza.
Molano y su lenguaza
a señalar se dedica
sin la prueba jurídica
pues ya el muy bien lo sabe
que ni la moción le cabe,
pero a muchos perjudica.

Cada día hay un escándalo:
contrataciones costosas,
licitaciones dudosas;
pero culpable es el vándalo.
Tendremos que quemar sándalo
en esas instituciones
donde malas vibraciones
a la buena fe asaltan
y la corrupción resaltan,
sobre todo, en elecciones.

En lo público es la norma
y ocurre en lo privado,
es un solo entramado
que a Colombia deforma.
Deshonestidad en forma,
ni la firma es de confiar
pues logran engatusar
y se “pierden” los recursos
en “actos de fe” ilusos
y en Delaware consignar.

Y no para la matanza
mientras el país se fragmenta,
una realidad sangrienta
donde el terror se afianza.
Es muy poca la esperanza,
no se respeta la vida
y el estado no la cuida.
Las garantías son muy pocas,
para los que abren sus bocas,
la paz nos está prohibida.

Mantener este conflicto,
es la excusa perfecta
que al traqueto no afecta
y tiene al país aflicto.
Un negocio irrestricto
con jugosos dividendos
y sus crímenes horrendos,
que por su ilegalidad
y absurda brutalidad
llenó al país de remiendos.

Comparte!
Scroll to Top